Mientras el Papa Francisco abre las puertas de la Iglesia a divorciados y homosexuales, todavía hoy en día algunos sacerdotes insisten en 'tomarse la ley de la Iglesia' como algo propio. Mientras el Papa afirma que los niños no son resposables de nada, y que cualquier niño debe de ser bautizado si así lo desean sus padres, sean estos heterosexuales, solteros, homosexuales o de color verde, algún cura se niega a obedecer estas instrucciones.
Y en este caso, vuelve a suceder, ahora en Tenerife. Una pareja de chicas, casadas legalmente van a bautizar a su bebé en un bautizo con otros cuatro niños, y en el momento en el cual el bautizado sería el de nuestras protagonistas, parece ser que el sacerdote se acercó a la madre "no biológico" y le dijo que ella no podía subir al altar, ya que no era la madre biológica del bebé.
La madre a la cual no se le permitía asistir en el Altar al bautizo de su hijo se mantuvo al margen durante ese momento, pero según ella misma, cuando terminó la ceremonio subió al Altar, y delante de todos los presentes, unas 300 personas, contó lo sucedido.
Según quien cuente lo que sucedió, las versiones son diferentes, según el sacerdote, much@s homosexuales empezaron a gritarle, ya que según él, todo estaba orquestado. Según la madre, ella se mantuvo al margen, y cuando terminó contó lo sucedido.
Gritos en contra, y aplausos a favor de esta decisión... ambas cuestiones cuentan las dos partes.
Lo cierto es que para bautizar a tu hijo tienes que asistir a unos cursillos, y ambas madres asistieron, y no fué hasta el momento del bautizo en el cual el cura comentó que la madre "no biológica"no podía participar activamente en ese acto importante para ella.
¡Que cosas!
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