En todos los medios de comunicación del mundo, incluyendo telediarios (como primera noticia) se está ofrenciendo el "secuestro" por parte de un trastornado, que en nombre del Estado Islámico entró en una cafetería y secuestró a diecisiete personas.
El resultado final, el asesinato de del Gerente de la Cafetería, Tory Johnson, de una abogada Katrina Dawson y del secuestrador. Terrible suceso que puede llegar a asustar a los paises que libremente decidimos vivir en sociedades democráticas y libres, valga la redundancia.
Lo terrible de este suceso, al margen que un estúpido decida acabar con la vida de otros seres humanos es que en los medios de comunicación se ofrecen datos contínuos del asesino, y de las víctimas. De la abogada sabemos si está casada, si tiene hijos y su edad. Pero del gerente, Tory Johnson, en "ningún medio" se habla de su pareja desde hacía catorce años, con quien convívía. ¿Por qué?
Terrible noticia el asesinato, y terrible noticia no "contar" toda la verdad familiar de los asesinados. Porque el "silencio" protege la homofobia, y en esas estamos.
Fotografía publicado por el periódico El País, firmada por la Agencia EFE.
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