El pasado  mes de Enero se ha producido una de las Ferias más esperadas por el público en general como es FITUR.  Y este año se produce una doble celebración, los 40 años de su primera edición y el 10° aniversario de la sección oficial LGTB.

He tenido la oportunidad de recorrer los pabellones que albergan a diferentes países, regiones, operadores, hostelería, empresas y cada vez me asombra comprobar cómo a pesar de la globalización aún quedan zonas con su propia idiosincrasia apenas alterada.

Pero lo que más me produjo satisfacción fue la zona dedicada al Turismo LGTB. Aún recuerdo esos años iniciales en donde apenas existía una zona referenciada y casi pasaba desapercibida. Solo la bandera Arcoiris de algunos stands te señalaba que estabas en una zona en donde muy pocos expositores ofrecían sus ideas para las personas LGTB, como algún hotel de Fuerteventura, otro más de Tenerife y la zona de Más Palomas, y un par de agencias de viajes.

Con el paso de los años, y no sin ciertas polémicas acerca del logotipo de esta zona, ha ido ganando en metros cuadrados, en stands, en posición más accesible y contando con un escenario desde el que poder ofrecer las charlas, conferencias y presentaciones destinadas a empresas y público en general. Y lo mejor es que la presencia de MUJERES es cada vez mayor. Y ahí estaba la zona de ELLA y sus empresas asociadas, dedicadas a las mujeres visibles. O el stand especial de Extremadura donde Fundación Triángulo está implicada. O el recién incorporado de Castilla-La Mancha, abriendo sus brazos a la realidad LGTBI. Y es que apostar por esta zona es una manera de implicarse en la visibilidad y reconocimiento de la realidad y diversidad de las personas LGTBI. Esto es algo que ya realizaban Madrid, Valencia o Euskadi desde  ediciones anteriores. Y la nota internacional serían Portugal, la ciudad de Budapest e Italia.

Pero la zona LGTBI es más que fiesta, sol, playa y cuerpos espectaculares. Y más que empresas u organismos buscando el dinero de las personas LGTBI. Cuando se propone un stand en esta zona se trata de unir la parte comercial y empresarial con la parte social y de visibilidad LGTBI. Ese es el caso de AEGAL, Shangay Revista, Mírales y OvejaRosa, ELLA festival, Extremadura Amable, quienes promueven la visibilidad y diversidad LGTBI permitiendo un enfoque más positivo y relajado en las relaciones entre personas. Y es que lo que busca de manera principal una persona LGTB es que donde se hospede, descanse, reponga fuerza o se divierta, no existan comentarios discriminadores, ni trato insultante, ni tener que estar dando explicaciones una y otra vez por ser quien es y amar a quien ama.

Puedo entender que para algunas personas la presencia de stands que representan a ciertos sectores conservadores puede chocar, pero no olvidemos que su presencia puede ayudar a cambiar mentalidades. Y esperemos que ese sea el caso de Italia, que a pesar de la intervención del Embajador lo único que promocionan medianamente LGTB-friendly es la zona de Milán y aprovechar la figura de Leonardo Da Vinci como reclamo. O la ciudad de Budapest, donde el gobierno de Hungría no es precisamente receptivo a la igualdad para las personas LGTB. Todo lo contrario de Portugal, país vecino que te puede ofrecer sus encantos naturales al igual que la sauna mixta recién abierta en Lisboa.

Pero no creáis que el Turismo LGTB se queda en esta zona. Al ir visitando diferentes stands, descubres que algunos países y organismos están abriendo vías de turismo para las personas LGTB. Es el caso de Colombia, que desde 2014 tiene reconocido el matrimonio igualitario, y promociona sus zonas más coloristas como Medellín o Cartagena de Indias. O Brasil, que también quiere recibir a las personas LGTB con los brazos abiertos. Y México, que en determinados estados federados son más aperturista, y celebrará un evento para mujeres LBT en San Miguel de Allende. Y ya sabemos que Cuba es otro destino que intenta abrirse a la Diversidad, y allí están apostando por un concepto de hoteles liderados por la marca Muthu Hotels. Y es que este año parece que Latinoamérica se ha implicado en el turismo LGTB, como sucede igualmente con Costa Rica, Chile o Argentina, quienes añaden a sus ofertas turísticas habituales la diversidad afectivo-sexual. Y es más que probable que otros países del entorno se vayan sumando  y apuesten por la vitalidad que las personas LGTB pueden aportar.

Los países europeos no hacen tanta mención a esta realidad, y no será porque todos tienen legislaciones que amparen a las personas LGTB y a sus familias. Malta apuesta plenamente, Gran Bretaña a pesar de no tener stand propio trata de ofrecer lugares amables para las personas LGTB, Alemania hace bandera de la ciudad de Berlín como  zona turística, Austria te refiere los semáforos de Viena y el haber ganado Eurovisión. En cuanto a los países del Este de Europa o próximos a Rusia, el tema LGTB era más bien desconocido o mejor dicho, con todo un conjunto de expresiones te daban a entender que de ese tema mejor no hablar. Un contraste más que evidente con los países nórdicos, donde todo eran sonrisas.

Y a medio camino de Europa y Oriente Medio se sitúa Israel, país que yo visité y del que puedo dar testimonio del aperturismo entre la ciudad de Tel Aviv y la costa mediterránea  frente a la zona de Jerusalén y otras poblaciones. Y de igual manera le pasa a Turquía, donde la ciudad de Estambul posee zonas de ocio algo más abiertas a las personas LGTB.

Y pasando a la zona de Oriente Medio, es una lástima que las bellezas de esos países no puedan ser disfrutadas libremente. Y otro tanto les sucede a la inmensa mayoría de los países de África, a excepción de Sudáfrica.

Y si nos dedicamos a la zona del Lejano Oriente,  la amabilidad es la seña de identidad de casi toda esa zona. A cualquier turista lo van a agasajar a pesar de que la legislación sobre temas LGTB esté muy alejada de su idiosincrasia. Aún así, existen ejemplos como la prefectura de Kioto en Japón que quiere promocionarse como ciudad en donde celebrar de manera visible las bodas LGTB.

He dejado fuera de esta exposición las zonas de España, ya que para poder relatar las ofertas haría falta otro artículo. Y me disculpo por si he olvidado alguna otra zona, y es que FITUR es la vuelta al mundo en menos de una semana.