Jutte Ehrmann-Wolf es una exárbitro alemana que ha tenido la valentía de denunciar públicamente esta sangrante situación, acusa a la IHF de homofobia (aversión obsesiva hacia las personas homosexuales). Esto adquiere un cariz muy grave, ella no es la única que ha sido vilipendiada por su orientación sexual y, según comenta, algunos miembros de la ejecutiva de la IHF valoran más su vida privada que su demostrada capacidad como delegada.
Hasta la ex internacional noruega y capitana del Larvik HK, Gro Hammerseng-Edin, ha declarado que este debe ser un debate público. Qué pena que el vicepresidente, español por cierto, de la IHF, Miguel Roca no reconozca esta discriminación. La TV2 trató de conseguir la versión de la IHF y le resultó imposible, pero Roca dijo "no creo que sea cierto, si tienen pruebas tendrán que publicarlas". Los acomodados siguen metiendo la cabeza debajo de la tierra. En una situación muy similar a la de Ehrmann-Wolf se encuentra la española Carmen Manchado, que también actuó como delegada arbitral en el pasado Mundial de Serbia 2013.
Muchas veces no es oro todo lo que reluce, todas las iniciativas pro mujer llevadas a cabo por la IHF son puro escaparate. Me contaron que en la última asamblea, celebrada en Sochi, a alguno se le llenaba la boca hablando del superávit económico en las arcas de la IHF. Es curioso que tras firmar un nuevo y millonario acuerdo televisivo con Bein Sports (filial de Al Jazeera) en 2014, no hayamos podido ver gratis, en streaming y en alta definición, todos los encuentros del Mundial de Dinamarca 2015 a través de una web que se colgaba en hora punta.
Ojalá que más figuras de nuestro deporte se mojasen, jugadoras y dirigentes. Algunos ya lo han hecho, el prestigioso entrenador del Flensburg, Ljubomir Vranjes, denunció en su Twitter esta injusticia (IHF = Edad de Piedra):
Para leer el artículo completo publicado en el blog deportecienporcien, pinchad aquí.
© 2014 - 2024 Development by Clara Díaz Fonticoba. All Rights Reserved.