Deshacerte de la grasa que se instala en la zona abdominal en forma de antiestéticos michelines requiere un “plan de choque” que incluya ejercicio aeróbico y una dieta baja en grasas y en carbohidratos que obligue a tu organismo a tirar de esas “reservas” que resultan ser excesivas.
Los cítricos, los vegetales de hoja verde, las carnes magras y el pescado azul son algunos de los alimentos a incluir en una dieta anti michelín
Un buen entreno cardio y animarte a practicar deportes como correr, montar en bicicleta o nadar te ayudará a reducir grasas con rapidez, pero además, tienes alimentos que son realmente efectivos a la hora de conseguir un abdomen liso.
Recurre a las frutas como fuente de vitaminas y minerales de escaso aporte calórico (¡ojo no todas!). La piña, rica en potasio, los cítricos, especialmente el pomelo, los frutos rojos, con los arándanos como excelentes aliados, y las “reinas del verano”: el melón y la sandía, con su alto contenido en agua y su poder saciante, son las mejores “quemagrasas”.
Apúntate al picante . Pimientos rojos picantes, guindilla verde, cayena… como aderezo o como mini guarnición (no hay que abusar), estos alimentos aportan antioxidantes y además contienen capsaicina (lo que les da su particular y “ardoroso” sabor), un ingrediente que acelera la destrucción de los lípidos corporales.
Té verde (y también café verde, sin tostar). Con capacidad para luchar contra los radicales libres son, además, dos poderosos estimulantes que no solo te ayudarán a mantener activo tu sistema nervioso, sino que incidirán en el metabolismo de las grasas.
Huevos. Pura proteína de alto valor biológico y grasas mínimas ¡imprescindibles!
Pollo y pavo. Incluye en tu dieta anti grasas carnes magras. Una pechuga de pollo a la plancha con una ensalada variada (importante los vegetales de hoja verde) es una comida perfecta para luchar contra el “michelín rebelde”.
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