Nos suena, y por desgracia nos seguirá sonando. Polonia se está alineando en ese bando de paises supuestamente occidentales en los cuales se comienza a extender unalgtbifobia fuerte.
Hoy, en septiembre de 2020 auguramos que en dos o tres años, Polonia estará probablemente a la altura anti homosexual de su vecina Rusia, pero en este caso Europa debe de hablar, y rápido.
Psicólogos y expertos de todo tipo de este país, están criticando las peticiones de muchos grupos para legalizar las terapias de reconversión sexual. Estas terapias NO HAN DEMOSTRADO NUNCA que son eficaces para cambiar la orientación sexual de ningún ser humano, y por supuesto, muchos menos cambiar 'la mente' de una persona transexual.
Las historias contadas por personas que han sido encerradas en estas clínicas son simplemente terribles.
No existen grandes organizaciones médicas en el mundo que avalen esta terapia.
Polonia, así no. Europa, así no. Nuestro silencio convertirá este país en un aliado de la mala gente, dicho queda.