En Tanzania se ha constituido un grupo de diecisiete personas que se encargarán de velar por los 'no-derechos' de las personas LGTBI. Este grupo se dedicará de perseguir y detener a homosexuales y transexuales para meterlos en la cárcel hasta treinta años.
La Organización de las Naciones Unidas y muchas Asociaciones pro-Derechos Humanos piden el gobierno tanzanés que frene este acoso.
La legislación del país prohibe expresamente las relaciones homosexuales, y se pide la colaboración de la ciudadanía para que se informe de personas supuestamente homosexuales para investigarles, y en su caso detenerles.
Para más descarnio, el gobierno de Tanzania quiere 'curar la homosexualidad' con alguna terapia de reconversión, volviendo a las prácticas de mediados del siglo pasado. Estas terapias están demostradas que no funcionan, pues no se puede curar 'algo que no está enfermo', como es el caso de la homosexualidad y de la transexualidad.
En cinco días de esta propuesta, que supuestamente comenzará su 'trabajo' la próxima semana, ya se han recibido casi seis mil 'denuncias' contra supuestos homosexuales y transexuales.
¡Terrible noticia!. Hay que dar eco a esta noticia para ejercer presión internacional contra este medida.