Desde este martes 28 de junio, en el que se conmemora el inicio de la revuelta que en Nueva York visibilizó la realidad LGTB, en la localidad de Encinillas se colgará la Bandera del Arco Iris en homenaje a las personas que sufren discriminación por motivo de su orientación sexual.
Esta bandera estará en el balcón del Ayuntamiento durante toda la semana, para recordar que también en las pequeñas poblaciones de nuestra geografía, las personas LGTB y sus familias existen.
“Para esta localidad es motivo de orgullo ser de nuevo referente en el mundo rural de esta provincia, ya que somos por segunda vez el ayuntamiento de una población de 300 habitantes quien realiza este apoyo hacia nuestros vecinos”, explican desde el Consistorio.
Esa visibilidad y ese apoyo se puede demostrar de muchas maneras, y en el caso de Encinillas, esto se logra con “la posibilidad de realizar eventos sociales y familiares en los locales que el ayuntamiento pone a disposición de todos sus vecinos, sin importar lo que en ellos quieran celebrar”, explica Ana Cabeza teniente de alcalde de Encinillas.
“La convivencia y la diversidad afectiva y familiar es lo que enriquece a las poblaciones, y en el mundo rural, esa visibilidad es mucho más necesaria para ayudar a romper estereotipos”, afirma Gema Segoviano, vecina de esta localidad y vocal de Educación de la Asociación Segoentiende (Asociación LGTBH de Segovia) y quien además considera que esta ocasión sirva para “hacer reflexionar por todo ese odio hacia las personas LGTB y que la matanza de Orlando no se vuelva a producir, ni todos esos asesinatos en los países en donde amar a alguien de tu mismo sexo te puede costar no solo la cárcel, sino la pena de muerte”
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