Es una buena noticia, aunque a medias. Pero, sigue siendo una buena noticia. El líder de la banda rusa que se hizo famoso hace un año por torturar a homosexuales y transexuales y colgar los videos en las redes sociales, incluyendo la muerte de algunos de ellos entrará en prisión y estará cinco años entre rejas.
La parte "impactante" es que su pena de cinco años no tiene nada que ver con la tortura de gente LGTBI, sino el racismo.
Se llama Maxim Martsinkevich, y fué el "jefe" de la banda llamada "Occupy pedofilia", que se dedicaban, o se dedican aún hoy en día, a castigar a los "pederastas homosexuales". El Problema es su consideración de pederastia, ya que cualquier homosexual o transexual es un pederasta.
Se le detuvo a principios de año en Cuba, y se le extraditó a Rusia con los cargos de "extremista", después de cometer delitos similares en Cuba a los que casi "libremente" realizaba en Rusia. Aunque para él no es nueva su visita a la cárcel, pues ya se ha paseado por algunas cárceles de su país anteriormente.
Otra buena noticia es la petición de condena para otros nueve miembros de este grupo. El juicio se celebrará el mes que viene.
Fotografía por VK
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