El 'DramaQueen' está servido. Las televisiones europeas han cancelado el Festival de Eurovisión 2020. La primera cancelación de este festival en su historia, pero el 'coronavirus' no solamente está haciendo estragos en la economía y en la salud, sino sobretodo en la cultura. Todo lo 'cultural' público se ha cercenado de cuajo, y nos quedaba nuestra querida Eurovisión, y también ha caido.
Se celebrará el año que viene, en el mismo sitio, y la televisión pública española ha comunicado que acaba de plantear a Blas Cantó, representante de este año, a ser la persona que cante en nombre de la Televisión Pública Española en el Festival del próximo año.
"RTVE apoya y entiende la difícil decisión tomada por la Unión Europea de Radiodifusión al cancelar el certamen europeo debido a la situación sin precedentes creada en todo el mundo por la pandemia del coronavirus. Las cambiantes circunstancias que se están produciendo tanto en Países Bajos, anfitrión del festival, como en el resto de los 41 países participantes, han hecho imposible garantizar la protección de todas las personas implicadas en esta edición", afirma la RTVE.
Supuestamente las canciones no deben de ser las mismas que iban a participar este año, según la legislación propia del Festival, pero ya veremos. Es una emergencia y todo puede cambiar. Seguiremos informando.
Deseamos y esperamos que toda esta locura de cancelaciones termine. Será buena señal.
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